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La importancia de relacionarse de los niños más allá del colegio

Acudir al colegio es una actividad obligatoria para cualquier niño y no solo beneficiosa para su educación y su formación. El colegio es un lugar vital para el correcto desarrollo de los más pequeños y como elemento para la sociabilidad entre personas de su misma edad. Pero no solo es aquí donde el niño aprende valores como la tolerancia, el respeto, la solidaridad… en definitiva hay otros espacios donde los padres deben fomentar la sociabilización de los niños.
El paso por el colegio marca el carácter y la formación de la personalidad de cualquier niño, incluso algunos psicólogos han llegado a afirmar que es el colegio el escenario más importante para cualquier niño. Son muchos los casos que, pese a no vivir en un entorno estable y estructurado, el colegio funciona como el arma de defensa perfecta para poder construir una personalidad y una formación óptima y necesaria para un buen paso de la infancia a la vida adulta.
Sin embargo, no es solo el colegio el escenario donde los padres deben contemplar que sus niños se eduquen y se relacionen con otros niños. Llevar a éstos a otros lugares didácticos y necesarios, ayudará sobremanera a un buen desarrollo de las aptitudes sociales de los más pequeños. Y es aquí cuando los parques infantiles juegan un importante papel. La importancia de relacionarse con los niños más allá del colegio es vital y en los parques infantiles, tanto solo acompañados de sus padres o familiares como acudir a ellos con amigos, hermanos o primos les ayuda a sociabilizarse más.
El entorno de juego de un niño no debe porqué ser siempre el mismo. De hecho, no debería ser siempre el mismo. Es decir, el colegio, el barrio, el parque de al lado de casa, los mismos amigos y primos… está claro la importancia de generar vínculos y estrechar lazos entre amistades y núcleos cercanos pero también hay que ayudar a que el niño se relacione con otros niños y se sociabilice. Llevar a los niños a parques infantiles ayuda a conocer a nuevos niños, a fomentar actitudes con otros niños. Éstas pueden ser la solidaridad en el juego, la tolerancia con otros niños, fomentar la imaginación, realizar actividades lúdico y didácticas con niños y niñas de su edad… y que éste tenga en cuenta que más allá de su círculo más cercano, el sociabilizarse con otros niños, aún siendo desconocidos, le ayudará a una mejor empatía y a un mejor desarrollo en la creación de relaciones personales en su adolescencia y en su vida adulta.